Maruja
De Ema Wolf
CAPÍTULO 1
Veremundo es un monstruo, científico que vive en una mansión.
Recibe una visita inesperada: su tía Maruja. Debido a que los niños tiraron
basura y taparon, un caño. El cementerio se inundó.
Veremundo se desmayó, cuando supo que su tía iba a quedar a vivir en la
mansión.
Vere trabaja en un experimento muy importante: convertir mediante un
chimichurri a una oruga en una boa estrujadora.
CAPÍTULO 2
Veremundo piensa una manera de deshacerse de la tía Maruja. Envía
muchas cartas a obras sanitarias para que arreglen el caño.
Comienza los problemas de convivencia con Maruja, ella trae a sus amigos
a la mansión, etc.
Obras sanitarias le contesta a Veremundo: su pedido ha sido registrado.
Maruja inicia un curso de detectives.
Cansado Veremundo, piensa en como deshacerse de su tía y de repente
ve a los niños desde el mirador.
CAPÍTULO 3
Veremundo se da cuenta de que los que arreglan el caño son los de la
municipalidad. Comienza a enviar cartas ahí.
Maruja termina el curso y se recibe de detective. Pone un aviso en la Voz
(el diario).
Luego de unos días recibe un caso: Basilio perdió su cabeza. Maruja tiene
que resolverlo.
CAPÍTULO 4
Comienzan a investigar el caso de Basilio. Maruja envía a Veremundo a
buscar pistas. Va a la (ligustrina)donde suele estar Basilio y donde piensan
que perdió la cabeza.
A su regreso, Veremundo de entre todas las pistas que trajo, encontró en
la basura un papel super importante que tiene un símbolo de una secta
secreta: el lagarto azul barbudo: comienzan a investigar Sectas.
CAPÍTULO 5
Veremundo descubre que los niños tienen tatuados el símbolo de la secta.
Maruja envía a Jesuso a investigar a los niños y otras cosas.
Veremundo envía otra carta a la Voz quejándose del caño. ¡La
municipalidad le poda los árboles!.
Maruja (aburrida) limpia el laboratorio de Vere: es el principio del fin.
CAPÍTULO 6
Luego de la limpieza, Veremundo encuentra el laboratorio estropeado:
¡Adiós experimento!
Comienza una discusión terrible entre Vere y Maruja.
Ofendida, Maruja decide irse a vivir al jardín, comienza a cavar su tumba y
encuentra un túnel.
Regresa Jesuso y de sus averiguaciones descubren que no había secta.
Sólo chicles batifruti, que tenían en sus envoltorios la imagen de un
Lagarto azul barbudo.
CAPÍTULO 7
Nuevamente necesitaban ¡pistas!. Están en cero en cuanto al caso de
Basilio.
Piensan Maruja y Veremundo, hasta que a Vere se le ocurre:¿no la habrán
escondido en la ligustrina de la plaza?.
Por ella fueron, a través del túnel del jardín (descubierto por Maruja) que
llega a la plaza.
Comienzan la aventura, llegan a la salida del túnel que da a la plaza, hay
muchos cascotes, Vere intenta sacarlos y…¡una avalancha de agua podrida
los arrastró hasta el principio del túnel!. De repente, parado al lado del
túnel, ¡aparece Basilio con su cabeza!.
CAPÍTULO 8
Maruja y Veremundo escuchan las explicaciones de Basilio: se olvidó la
cabeza en el dentista. La dejó para que le arreglaran las caries (ya que le
encantan los chicles batifruti que no puede dejar de comerlos). Al otro día
la secretaria del dentista le avisó que su cabeza estaba en el consultorio.
Tía y sobrino estaban muy decepcionados con la noticia, porque
trabajaron mucho: movieron cielo y tierra para encontrarla.
La decepción de Veremundo era enorme: los niños no tenían nada que ver
con el asunto.
Otra noticia más importante llega a la mansión: ¡el caño se había
destapado por milagro! Y casi no quedaba agua en el cementerio.
Los amigos de Maruja hicieron una fiesta en casa de Vere para festejar lo
sucedido: la tía regresaba al cementerio.
¡Al fin Veremundo se libraba de su tía!, lo que le alcanzaba para alivianarle
la vida.
EPÍLOGO
Pasados unos días, Maruja y Veremundo siguen discutiendo…¡ahora
porque Maruja se quiere llevar el televisor a la cripta y Vere lo defiende
con uñas y dientes!
Maruja y sus amigos se terminaron yendo de la mansión y la casa
descansa en paz.
Veremundo continua con nuevos experimentos, porque a la oruga al final
le salieron alas, le desaparecieron las patas, se convirtió en una mariposa
que salió volando al jardín.
Llegó el invierno, nevó en Acussuso, los niños salieron de vacaciones y
Veremundo y Jesuso estaban muy solitarios.
Veremundo comienza a extrañar a Maruja, pero no lo reconoce. Sólo
planea ir a visitarla con la excusa del aniversario de su defunción, pero
para ¡recordarle cuánto lo había molestado en su estadía en la mansión!.
FIN.
